Gracias al efecto de la lavanda, este tónico restaura los niveles de pH de la piel, mejorando la microcirculación y reduciendo la pérdida de agua transepidérmica para ayudar a mantener una intensa hidratación.
Devuelve a la piel una apariencia suave y elástica. Minimiza los poros y unifica el tono cutáneo.